Título en España:  Chop Shop
Título original: Chop Shop
Año: 2007
Duración: 84 min.
País: Estados Unidos
Dirección: Ramin Bahrani
Guión: Ramin Bahrani, Bahareh Azimi
Música: M. Lo
Fotografía: Michael Simmonds
Dirección de producción: Richard Wright
Dirección artística: Elliott Glick
Vestuario: Daphne Javitch
Montaje: Ramin Bahrani
Reparto: Alejandro Polanco, Isamar Gonzales, Rob Sowulski, , Carlos Zapata, Ahmad Razvi, Anthony Felton, Evelisse “Lilah” Ortiz, Michael “Gringo” Nieto, Carlos Ayala, Laura Patalano, Nick Jasprizza, Nick Bentley, Edwin Rojas
Sinopsis: Narra la historia, en un barrio a las afueras de Queens, Nueva York, de dos hermanos huérfanos de origen latino, Ale (Alejandro Polanco) e Isamar, que se ganan la vida trabajando en lo que pueden: él en un taller, entre otros muchos trabajos, y ella sirviendo comida de día y prostituyéndose de noche, con tan sólo 16 años. Las circunstancias de la vida han hecho que Ale madure antes de tiempo y se convierta en el responsable de su familia, cuando lo que le correspondería estar haciendo es estudiar y jugar.

IMDBFilmaffinity.

Chop Shop (2007) es una película de producción americana dirigida por Ramin Bahrani. La película nos muestra la vida de Ale, un joven latino, y su hermana Isamar en la zona de Willets Point, un área del barrio neoyorquino de Queens donde proliferan los talleres de automóviles y chatarrerías. Ale, mostrando la más pura tradición americana de esfuerzo ascendente, lucha día a día para ganar el suficiente dinero y tener una vida mejor lejos del suburbio de Queens. Desgraciadamente, Ale verá que sus idealismos de un futuro mejor no son acordes con la realidad que vive.


(El siguiente texto ha sido extraído de http://cineuropeoyamericano.blogspot.com/2008/06/chop-shop.html)

Tercer largometraje de Ramin Bahrani que cosechó éxito internacional: presencia en Cannes, Berlín y Toronto, premio Independent Spirit y el aval de su primer largometraje, Man Push Cart (Un café en cualquier esquina).

La película, de una factura impecable, se limita a mostrar la vida de estos personajes, sin juzgarles ni pretender inculcar ninguna enseñanza moral al espectador para que sea cada uno quien saque sus propias conclusiones. Sirve, igualmente, como fiel reflejo de la vida en el neoyorquino barrio de Queens.

Lo que más destaca del film son las interpretaciones, en concreto la del joven protagonista, que consigue llegar al espectador con la fuerza de su mirada. No obstante hay que tener en cuenta la maravillosa labor de dirección y fotografía, así como la agilidad de una cámara que se mueve constantemente como si fuera un personaje más.

Nos encontramos ante una película que sorprende, emociona y remueve la conciencia de los espectadores sacando a la luz un sector de la población que existe en la realidad pero nadie se para a observar. Además, sirve como demostración, una vez más, que los niños son niños y no tienen que preocuparse de las cosas de los adultos, sino de jugar, divertirse y estudiar. O esa es, al menos, la conclusión que saco, personalmente, de esta maravillosa historia.