Título en España: Beautiful Thing
Título original: Beautiful Thing
Año: 1996
Duración: 85 min.
País: Reino Unido
Director: Hettie Macdonald
Guión: Jonathan Harvey basado en su obra de teatro
Fotografía: Chris Seager
Música: John Altman
Diseño de producción: Mark Stevenson
Dirección artística: Chrysoula Sofitsi
Vestuario: Pam Tait
Montaje: Don Fairservice
Reparto: Glen Berry, Scott Neal, Linda Henry, Ben Daniels, Tameka Empson, Meera Syal, Martin Walsh, Steven Martin, Andrew Fraser, John Savage, Julie Smith, Jeillo Edwards
Sinopsis: Un largo y caluroso verano en Thamesmead, al sur de Londres. Jamie Cangel está faltando a la escuela más de lo normal, escabulléndose tras el televisor del apartamento donde vive con su madre, Sandra. En la puerta de al lado vive Leah, que tras haber sido expulsada del instituto, se pasa el día escuchando los discos de Mama Cass. Además, en el mismo bloque vive un compañero de clase de Jamie, Ste, un joven deportista y atlético que sin embargo recibe constantes palizas de su padre y de su hermano. Una noche, para escapar de la violencia doméstica, Ste se refugia en el apartamento de Sandra y duerme con Jamie. Mientras Sandra se desvive en el trabajo y en la relación con Tony, su novio hippy, Jamie y Ste van descubriendo gradualmente el afecto que sienten uno por el otro…
En Beautiful Thing (1996), Hettie Macdonald nos muestra el despertar amoroso de dos adolescentes en el complicado entorno de un distrito de Londres, Thamesmead, construido en la década de los 70 para realojar familias de los barrios de chabolas del sureste del Inner London. En ese entorno de exclusión social, los jóvenes protagonistas deben conjugar las habituales inseguridades del primer amor con el miedo al rechazo por su orientación homosexual.
(El siguiente texto ha sido extraído de http://cachecine.blogspot.com.es/2012/08/clasico-queer-critica-de-beautiful.html)
La historia que rodea a Beautiful Thing, uno de los clásicos modernos del queer cinema, es bastante curiosa. La película se basa en una obra de teatro de Jonathan Harvey, un profesor de secundaria de Liverpool. Tras el éxito de la obra teatral, una de las más exitosas de temática homosexual, Harvey decidió rescribir la historia para su paso a la televisión. Una vez estuvo acabada, Beautiful Thing gustó mucho y sus responsables decidieron distribuirla en los cines. Su presentación en público fue en marzo de 1996 en el Festival de cine gay y lésbico de Londres. Pero la historia trascendió los límites del queer cinema al recaudar más de un millón y medio de libras y estrenarse en más de una veintena de países, entre ellos España. Quince años después, Beautiful Thing, con una banda sonora a ritmo de los hits de Mama Cass, es una de las películas queer más queridas por el público de medio mundo. Fue una de las primeras películas que trató la realidad homosexual de forma directa. La película lleva el cine social de Loach o Leigh a otra dimensión. En Beautiful Thing hay la descripción de una juventud sin motivaciones, un barrio cuyas familias desestructuradas viven al límite entre la marginalidad y la ayuda de los servicios sociales. Todo ello insertando un cuento de despertar y descubrimiento sexual, una bellísima trama de amistad, unos actores que no parecen estar recitando las líneas de un texto y un tono de comedia crítica pero amable que la convierte en una de las películas más certeras y agradables sobre la problemática homosexual. Beautiful Thing es una fábula que toca temas tan duros como el bullying, el maltrato y el machismo en el seno de familias de mentalidad tradicional. En su día fue una película rompedora. Ahora queda un cuento cuyo único propósito es hacer sentir bien a su audiencia y hacer entender a todos que el amor no admite coartadas. Antes muchos se sintieron identificados con el sufrir y el sentir de Jason y Lenny, los dos protagonistas. En la actualidad puede que muchos hayan perdido la inocencia de los seres de la película. Queda, eso sí, una bonita historia que hace honor a su título y que va camino de ser un referente de la cultura (o contracultura) de toda una generación. Tan animada y atemporal como la cantante Mama Cass y sus Dream a Little Dream of Me y Make Your Own Kind of Music.