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Universitarios con la Infancia y el Aula de Cine de la Universidad de Zaragoza presentan el

VIII Ciclo de Cine sobre Derechos de Infancia y Adolescencia,
este año sobre la temática
Pobreza y exclusión social

Marzo 2019

 

Co-organizado por el Vicerrectorado de Cultura y Proyección Social de la Universidad de Zaragoza y por Universitarios con la Infancia.

Entrada libre. Películas en V.O.S.E.

Lugar y hora de celebración:

Zaragoza: C.M.U. Pedro Cerbuna (Calle Domingo Miral, s/n), 19:00 h.
Huesca: Facultad de Empresa y Gestión Pública (Plaza de la Constitución, 1), 19:00 h.

El tema elegido para Derechos de infancia y adolescencia VIII creemos que, dados los últimos datos sobre la penosa situación económica de muchas familias, se hace más necesario que nunca: pobreza y exclusión social. La crisis de 2008 hundió en la miseria a mucha gente y, más de diez años después, no han logrado recuperarse. Esa falta de recursos acarrea problemas de toda índole que, en el caso de los menores de edad, se agravan todavía más. Por ello, lanzamos nuestra reflexión a través del cine. Como siempre, miembros de Universitarios con la Infancia, o invitados, realizarán las presentaciones y coloquios de cada película en las proyecciones de Zaragoza.

Las películas:

Zaragoza 6 marzo – Huesca 4 marzo
Pixote, la ley del más débil (Pixote: A Lei do Mais Fraco)
de Héctor Babenco. 121 min. 1981, Brasil (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 7 marzo – Huesca 6 marzo
Ratcatcher
de Lynne Ramsay. 94 min. 1999, Reino Unido (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 8 marzo – Huesca 11 marzo
Rosetta
de Jean-Pierre y Luc Dardenne. 94 min. 1999, Bélgica (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 13 marzo – Huesca 13 marzo
Lluvia (Baran)
de Majid Majidi. 92 min. 2001, Irán (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 14 marzo – Huesca 18 marzo
Lilya forever (Lilja 4-ever)
de Lukas Moodysson. 105 min. 2002, Suecia (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 18 marzo – Huesca 20 marzo
El Polaquito
de Juan Carlos Desanzo. 88 min. 2003, Argentina (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 20 marzo – Huesca 27 marzo
Los niños del fin del mundo (Sag-haye velgard – Stray Dogs)
de Marzieh Meshkini. 89 min. 2004, Irán (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

Zaragoza 21 marzo – Huesca 1 abril
Chop Shop
de Ramin Bahrani. 84 min. 2007, Estados Unidos (ficha en Filmaffinity) (ficha en IMDB).

 

Organizadores:
Área de Actividades Culturales, Vicerrectorado de Cultura y Proyección Social.
Universitarios con la Infancia.

Colaboradores:
Vicerrectorado del campus de Huesca

Entrada libre

Enlace a la web del Aula de Cine de la Universidad de Zaragoza.

 

Presentación del Ciclo:

¿Es lo mismo pobreza y exclusión social? ¿Es la segunda consecuencia de la primera? No existe un consenso sobre la definición de exclusión social, pero ambos términos se encuentran relacionados. La pobreza, definida como falta de recursos económicos, acentúa la posibilidad de caer en posiciones de exclusión. Sin embargo, no toda exclusión social deriva de la falta de recursos económicos.

La pobreza no es una condición ni necesaria ni suficiente para considerarse excluido aunque a menudo lo acompañe. Además, incluso en sociedades con desarrollo económico similar, no es lo mismo ser pobre en el hábitat urbano que en el rural, ser pobre siendo hombre o mujer, ser pobre siendo autóctono o extranjero, ser pobre teniendo una discapacidad o sin tenerla. La exclusión social por tanto presenta una multidimensionalidad que va más allá de la dimensión de recursos económicos afectando los factores de exclusión a diferentes ámbitos vitales.

La exclusión social es un fenómeno multidimensional, multicausal, estructural y dinámico que se define por un acumulación de déficits que se interrelacionan o se retroalimentan entre sí. En la exclusión social, los sujetos marginados no tienen acceso o experimentan dificultades para acceder a oportunidades laborales, formativas, culturales o políticas en la sociedad en que viven. Una de las propuestas más aceptadas define siete dimensiones de la exclusión social: económica, laboral, formativa, sociosanitaria, residencial, relacional, y ciudadanía y participación. Con la llegada del mundo digital, se está empezando a mencionar una dimensión adicional: la exclusión o brecha digital.

Según diversas ONG españolas, cerca de un 27% de la población en España –más de 12 millones de personas– viven en situación de pobreza y exclusión social, existiendo colectivos muy vulnerables, como las personas sin hogar. España ocupa, además, el quinto lugar en la lista de los países europeos más desiguales, sólo superada por Bulgaria, Grecia, Rumanía y Letonia. Dos de cada tres personas reconoce que tiene dificultades para llegar a fin de mes y casi una de cada cinco personas lo hace con muchas dificultades. La pobreza y privación afectan de manera especial a los menores. Concretamente, informes de 2018 cuantificaron el riesgo de pobreza y exclusión social entre los menores de 16 años en un 31%, y entre los 16 y 29 años, en un 34,8%.

En esta octava edición del ciclo de cine sobre derechos de infancia y adolescencia, queremos poner el foco de atención en aquellos menores que sufren pobreza y exclusión social. Mediante la proyección de ocho películas muy distintas en cuanto a enfoque y procedencias –algunas de ellas no estrenadas en nuestro país–, queremos reflexionar con los asistentes sobre cómo impacta el problema de la pobreza y la exclusión social a los niños y adolescentes: cómo les afecta a su crecimiento como personas, qué problemas se encuentran durante su desarrollo educativo y social, cómo es la convivencia en su entorno, etc. En definitiva, cómo intentan sobrevivir, a pesar de las penurias y las dificultades, y qué impacto tiene en su desarrollo personal.

La primera película del ciclo, Pixote, la ley del más débil (Pixote: A Lei do Mais Fraco, 1981), del director Héctor Babenco, es una producción brasileña. Narra la historia de Pixote, un niño de 10 años de las calles de São Paulo que se ve envuelto en crímenes, prostitución y drogas.

Ratcatcher (1999), de la directora Lynne Ramsay, es una coproducción británico-francesa que nos presenta al pequeño James, un niño de 12 años que vive una experiencia traumática en la Glasgow de mitad de los 70s, ciudad que sufrió el exceso de población tras su apogeo de los años 60s cayendo en altas tasas de pobreza y con numerosas familias sin recursos viviendo de ayudas sociales.

Rosetta (1999), dirigida por los hermanos Dardenne, es una coproducción franco-belga. La joven Rosetta vive en un parque de caravanas con su madre alcohólica, tratando de sobrevivir y escapar de su situación mediante la búsqueda de un trabajo que le permita alejarse de su madre disfuncional y tener una vida estable.

La película de producción iraní Lluvia (Baran, 2001), dirigida por Majid Majidi, nos traslada a Irán para contarnos la historia de unos refugiados afganos que huyen de su país debido a la guerra con Rusia y a la opresión del régimen talibán. La película narra la historia a través de los ojos de un joven iraní, Latif, que trabaja como “chico de los recados” en la misma construcción donde trabajan ilegalmente los refugiados afganos.

En Lilya Forever (Lilja 4-ever, 2002), coproducción sueco-danesa dirigida por Lukas Moodysson, conoceremos la espiral descendente de Lilya, una joven de la antigua Unión Soviética, cuya madre le abandonó para irse a los Estados Unidos. La cruda historia nos muestra un caso real –adaptado con libertad–, abordando cuestiones como la trata de personas y la esclavitud sexual.

La película argentina de El Polaquito, dirigida por Juan Carlos Desanzo y estrenada en 2003, nos cuenta la historia real de un chico de la calle que se gana la vida cantando tangos en los trenes de la estación central de Buenos Aires, imitando a Roberto “Polaco” Goyeneche. Polaquito se verá hostigado de manera frecuente por la policía por su idilio romántico con una joven prostituta explotada por una mafia local, además de perseguido por otros bandidos del lugar. La película nos mostrará de manera bastante cruda la faceta más sórdida de la condición humana.

Los niños del fin del mundo (Sag-haye velgard, 2004), dirigida por Marzieh Meshkini y producida por Irán, Francia y Afganistán, nos sitúa en el Kabul post-talibán para contarnos las aventuras y desventuras de dos hermanos, Zahed y Gol-Gothai, cuyos padres se encuentran presos. Su único objetivo consistirá en conseguir dormir cada noche en compañía de su madre. Para ello, veremos las situaciones que inocentemente provocan los hermanos y cómo la realidad acaba imponiéndose sobre sus sueños infantiles.

Cierra el ciclo de este año Chop Shop (2007), una película de producción americana dirigida por Ramin Bahrani. La película nos muestra la vida de Ale, un joven latino, y su hermana Isamar en la zona de Willets Point, un área del barrio neoyorquino de Queens donde proliferan los talleres de automóviles y chatarrerías. Ale, mostrando la más pura tradición americana de esfuerzo ascendente, lucha día a día para ganar el suficiente dinero y tener una vida mejor lejos del suburbio de Queens. Desgraciadamente, Ale verá que sus idealismos de un futuro mejor no son acordes con la realidad que vive.

Universitarios con la Infancia, febrero de 2019